Tu bebé se acerca o está en el 9no mes y están pasando cosas como (puede empezar cercano el séptimo en algunos bebés):

– No puede dejar de verte ni un segundo porque grita como si te hubieras ido para siempre.

– Solo quiere que le cargues tú y ahora ni siquiera se va con su abuela o papi, con quien estaba cómodamente.

– Ha empezado a despertar más. Y recuerda que tu bebé sí duerme, como explico en el curso.

-Si toma teta la busca como si fuera hambre.

– Si dormía tranquilo en su cuna ya no lo hará, insistirá en dormir no a tu lado, encima de ti. Si dormía mal lo hará peor.

Importante: lejos de ser un retroceso en su desarrollo, es de lo más normal, de lo más lógico y por lo tanto debemos tratar de entenderlos y no forzar situaciones y separaciones innecesarias en búsqueda de la cacareada independencia.

Ante esta situación la culpa siempre es de la teta, ya no se llena, es dependiente, está malcriado, ya saben , ustedes viven estos comentarios y algunas hasta se lo creen.

 ¿Por qué se ponen así?
El bebé tiene mucho más afinado su sistema de alarma y sobrevivencia, sabe que quedar sin sus padres en una época hostil como las cavernas significaba sencillamente no sobrevivir. La sociedad, las casas, las sillas de bebés y los coches avanzaron, pero nuestro sistema de sobrevivencia es tan sofisticado que no va a cambiar tan fácilmente, menos en esta sociedad que promueve tanto el desapego.

En el libro «La ciencia de ser padres», de Margot Sunderland, se comenta que el sufrimiento que sienten los niños por la angustia de separación activa en el cerebro las mismas zonas que cuando padecen un dolor físico.

¿Qué hacemos?

– Actuar para calmar el dolor emocional de nuestros hijos tal cual como si fuera físico.Cuando se caen o golpean no esperas a que se calme solo, no hay que hacerlo tampoco con su dolor emocional aunque a ti te parezca que llora por nada (vale para todas las edades).

Si trabajas, lo primero que debes hacer antes de irte es despedirte y al llegar a casa es prestarle atención plena.

Si estás en casa – trabajando porque una nunca está quieta en casa- interrumpe tus labores cada hora o menos, si tu bebé no aguanta tanto distraído- para darle contención y seguridad, mientras tanto que esté en compañía de alguien con quien se sienta ya vinculado o sabiendo estas cerca, hazte sentir.

El juego de del “aquí está” ayuda mucho. Tapa tu cara preguntando dónde está mami, luego la destapas. Luego se lo haces a ellos, por segundos no te ven y luego sí, tu estás siempre allí y se dan cuenta poco a poco que no verte por segundos no es tan grave.

Háblale si debes separarte, ¿alguna ha ido al baño cantando o hablando? bueno en esta etapa toca más.

No me pregunten cuando tarda esto, porque dependerá mucho de lo que hayas hecho hasta ahora y de lo que haya pasado en la dinámica familiar pues hay situaciones que la mejoran y otra que las empeoran, algunos llegan hasta los dos años dando señales de estar allí.

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