Ese cuerpo que hoy notas con rareza y que no sientes que sea tuyo acaba de gestar vida.

Ese cuerpo que ves gordo y flácido, acaba de crear un milagro.

Ese cuerpo al que solo criticas al ver al espejo le brinda cobijo, alimento, contención a tu bebé.

Ese cuerpo que no se parece al de las revistas, Instagram y páginas web, es el cuerpo de una mujer real, recién parida, recién transformada en esto que llamamos MAMÁ.

Ese es tu cuerpo, el único que tienes, el más maravilloso. Sería genial que pudieras verlo con el mismo amor que ves a tu bebé cuando sonríe espontáneamente.

Asómate desnúdate al espejo y dile: Gracias cuerpo porque ser dador, sostenedor y protector de la vida.

Y entonces así podrás empezar el camino de ser una #MadreLeve.

La foto: es de @thebirdspapaya.

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